Cualquier estrategia de marketing global requiere de un poco de intuición humana, interés en aspectos creativos e innovadores y sobre todo conocimientos multidisciplinarios.

Por ejemplo, si quieres conquistar el mercado del Medio Oriente debes tener cuidado de promocionar productos o servicios que ofendan sus creencias religiosas, si prefieres el mercado de China es necesario conocer sus redes de comunicación para insertar tu negocio, y si optas por los países europeos es importante investigar sobre si tu producto o servicio no es un plagio de otro ya existente.

En fin, he resumido algunas cosas que desearías saber antes de comenzar una estrategia de marketing global sin perder tiempo y dinero.

Asegúrate de que tu traductor sea un experto en lo que vendes

Esto es más importante de lo que te imaginas. Cuando los traductores no comprenden completamente el mercado o las características de un producto, el ángulo del contenido puede cambiar, en consecuencia, el objetivo de promoción se pierde ya que no logra atraer la atención del público meta.

Evita las discrepancias en el contenido que intentas promocionar al mercado internacional, contratando a un traductor especializado o entrenándolo para que conozca a fondo tus productos y servicios.

No olvides darle ningún detalle importante, ya que las correcciones te pueden costar tiempo y dinero.

Antes de comenzar la localización de tu negocio, siempre asegúrate de tener a alguien que pueda corregir de manera confiable todas tus traducciones.

Generalmente sucede que el representante de ventas de esa región es el corrector de pruebas, pero todos sabemos que no es una idea sostenible, ya que esa persona tiene otras responsabilidades, le falta tiempo y podría no leer a fondo lo que se le está entregando.

Atento a lo que funciona en tu nuevo mercado

Debes comprender lo que se puede hacer en los mercados globales antes de comenzar a comercializar tus productos y/o servicios. Esto abarca desde qué medios usar, hasta cómo hablar con los clientes y cualquier promoción debe ser evaluada para determinar qué funciona y qué no.

Estas tres cosas que parecen muy simples marcan la diferencia al momento de crear tu estrategia de marketing global. Y antes de terminar te quiero aportar un último consejo: asegúrate de contar con las personas adecuadas que te ayuden a hacerlo bien.